En el taller de José

La comunión del presbiterio, cuerpo cuya cabeza es el obispo, cada semana santa se convierte en motivo celebrativo para la comunidad del Seminario. Esta mañana celebramos la santa Misa crismal en la catedral santa María de la Redonda en la ciudad de Logroño, junto a la comunidad de la diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño de la cual procede nuestro rector, Padre Eduardo Torres. La fidelidad al ministerio sacerdotal, como fruto del encuentro continuo con el Dios de las misericordias, fue una de las ideas más insistida en la homilía de Monseñor Juan José Omella, obispo de la diócesis antes mencionada, al cual nos une una buena amistad.

Desde temprano en la mañana ya nos dispersábamos entre las diversas parroquias de Pamplona y Villava en las que prestamos ayuda pastoral cada Domingo, para celebrar la entrada triunfal de nuestro Señor en la ciudad de Jerusalén. Organizar y participar en la liturgia, procurando su óptima celebración, es siempre para el seminarista una grata experiencia que le configura progresivamente al ministerio que aspira (con el auxilio, siempre necesario, de la gracia de Dios). Compartimos con ustedes la alegría y la profundidad de esta semana que comienza, les acogemos en nuestra oración agradeciendo por su amistad y pedimos nos acompañen siempre espiritualmente con sus plegarias y sacrificios.

Ya a las puertas de la Semana Santa meditamos la Pasión de nuestro Señor con la piadosa práctica del santo Via Crucis. Hemos unido a nuestra oración sus mejores deseos e intenciones.

Más de 150 seminaristas en camino hacia el castillo de Javier para celebrar el encuentro que reúne cada año a los seminarios diocesanos localizados en el territorio de la Diócesis de Pamplona-Tudela. La jornada comenzó en el Monasterio benedictino de San Salvador de Leyre. Allí compartimos un poco con la comunidad y recibimos el envío de peregrinación con la bendición del Padre Abad.  Al llegar a Javier celebramos la Santa Misa junto al arzobispo Mons. Francisco Pérez. Para finalizar compartimos el almuerzo, espacio en el que pudimos intercambiar ideas y sobretodo conocernos, en favor de una confraternización eficaz.

La espera de la semana santa se hace  ya inminente en la ciudad de Pamplona. Este viernes acompañamos a la Madre Dolorosa por la calles de la ciudad en su traslado a la santa Iglesia Catedral para dar comienzo al septenario.

Celebrar a san José es celebrar la fidelidad a Dios. Por tercer año consecutivo, el Seminario san José festeja a su patrón.  El equipo de formadores y los seminaristas damos gracias a Dios por la oportunidad de poder disfrutar de un estupendo día. El compartir fraterno se hizo fecundo gracias a la disposición de cada uno por dar lo mejor de sí. La liturgia fue el espacio de adoración en el cual pudimos unirnos a todos ustedes. Agradecemos su compañía espiritual.

Como todos los años, acudimos a Javier. Hemos celebrado el 75 aniversario de las javieradas. La jornada comenzó para algunos a las cuatro y media de la mañana recorriendo más de 50 kilómetros. La experiencia es siempre enriquecedora. Agradecemos a Dios esta oportunidad de compartir con la Iglesia universal que llega hasta Javier. Hemos tenido presentes sus peticiones. Gracias por acompañarnos espiritualmente.

Respondiendo al llamado del santo padre el Papa Francisco, acudimos al Seminario Conciliar San Miguel acompañando a nuestros hermanos seminaristas de esta diócesis de Pamplona-Tudela en la adoración al Señor en la Eucaristía. Además de las intenciones del Papa presentamos las de todos ustedes bienhechores y seguidores.

Considera cómo Jesús,  andando este camino  con la cruz a cuestas,  iba pensando en ti  y ofreciendo a su Padre  por tu salvación  la muerte que iba a padecer.